domingo, 18 de noviembre de 2007

Oda a un vicio incontrolable


Al plantearme hablar sobre este tema toque fondo porque es algo de cual no me siento orgullosa. A mi mente se viene la imagen cuando tenía 14-15 años y jugaba a prender los cigarros que mis papas acostumbraban fumar después de almorzar o cenar "para bajar la comida". Claro que en aquellas épocas no pasaba de solo prenderlo o darle un pitadita para ver que se siente, pero cuando crecí un poco más me los fumaba a escondidas porque descubrí en ellos sensaciones plancenteras. Cuando ya tenía la mayoría de edad "porque ya era grande", ya me fumaba los cigarros con mis papas y hermanos en las sobremesas o con mi abuelo (q.e.p.d.) y mi tía afuera de la casa (porque toda mi familia fuma). No se hasta que punto tiene que ver este vicio con mi familia fumadora por excelencia, pero no puedo negar que un cigarrito unía a la familia! Ahora extraño esos días de cigarreo familiar y añoro momentos de puro vicio.Quiero confesar que lo quise dejar más de una vez, lo máximo que pude fueron 4 semanas , pero el solo olor a tabaquito me llama a pecar una y otra vez. No se si algún día podre, no pierdo las esperanzas de llenarme de fortaleza y voluntad para hacerlo de una sola vez y limpiar estos pulmones de más de 10 años de tabaquismo. Algún tip? Pero bueno hasta que me decida a dejarlo lo disfruto ahora y me voy a fumar un cigarrito.

No hay comentarios: